27 de abril de 2010

El nuevo timo de la estampita

Cada vez tengo a más gente a mi alrededor que lleva la dichosa pulserita con el holograma que se supone que obra maravillas en el cuerpo humano (al igual que un placebo, vamos...) y, solamente por curiosidad, buscando en internet los hechos científicos y reales en los que se supone que se basa esta afirmación, me he encontrado con una entrada en el blog de "maikelnai" (sí, sí, el de "El coche fantástico" nada menos...) que tengo que copiar aquí, porque se me saltaban las lágirmas de risa al leerlo...

Aquí lo teneis:

Uno de las últimos productos milagro en llegar a nuestros hogares es la reinvención de las pulseras magnéticas, aunque en esta ocasión el timo llega revestido de hi-tech… Ya no hablamos de metal sino de neopreno, y el poder curativo no emana de la magnetita sino de ¡tachán! los hologramas (los imanes ya no curan, ahora lo que mola son las fotografías tridimensionales). En su página web, la describen a la perfección (ojo, el olor a magufo es tan fuerte que alguno de vosotros puede llegar a sentir nauseas, mareos e incluso vómitos).

Power Balance ® es un holograma de MYLAR en el que ha sido almacenada una frecuencia procedente de materiales naturales conocidos por sus efectos beneficiosos para nuestro cuerpo.

También se puede leer (no sin sonrojo):

“Cada objeto de este planeta tiene una frecuencia que puede medirse con exactitud, Albert Einstein sabía que todo en el universo emite una frecuencia única“.

Finalmente el plato fuerte, con el que esperan (y por lo que oigo, lo están consiguiendo) engañar a un montón de chavales deportistas: añadir los rostros de personajes famosos que la usan. En la galería de fotos descubrimos a Shaquille O’Neal, Rubens Barrichelo, y ¡cómo no! dos ejemplos de casa: el piloto de rally Dani Sordo y el surfer Pablo Gutiérrez, (este último responsable de que el timo se esté extendiendo particularmente rápido entre los surferos patrios tal y como me cuenta mi sobrino).

A simple vista el timo cumple con todas las características del producto mágico:

  1. Hace referencia a la energía (“power”)
  2. Introduce el término “natural” (el mejor señuelo)
  3. Usa términos científicos (“frecuencia”, “células”, “físico-mecánicas”, “química”)
  4. Menciona a Einstein (este es otro paso ineludible)
  5. A falta de ciencia, básate en testimonios (mi amigo Manolito lo probó y va de cine)
Supuestamente estas pulseras emiten un tipo de radiación electromagnética beneficiosa para la flexibilidad (¿cómo llega hasta las articulaciones?) y equilibrio (¿cómo viaja hasta el oído interno?). Pero además… ¿cómo explicarle a la gente que los hologramas emiten radiación electromagnética (igual que los ceniceros, o el papel higiénico y el resto de cuerpos que nos rodean) en función de su temperatura?

Pero ¿es que no han visto las típicas imágenes de un visor infrarrojo en las que las cosas calientes aparecen con más brillo que las de su frío entorno? ¿Y acaso no es la radiación infrarroja un tipo de radiación electromagnética?

En fin, espero no perder mucho más tiempo con esto. Si has decidido creer en los poderes curativos de esta pulsera a pesar de las advertencias, escucha al menos mi consejo y te ahorrarás el precio de la Power Balance (por cierto, nada baratas, valen más 30 euros):
  1. Pídele a tu padre una vieja tarjeta de crédito VISA que ya no use.
  2. Pídele a tu herman@ una goma para el pelo.
  3. Recorta la paloma holográfica de la VISA y pégala con celo a la goma.
  4. Póntela y “equilíbrate” tu solo con la pulsera DIY.
¡Tachán! Igual de inútil que la de marca pero ahorrándote más de mil durillos (no me des las gracias).

26 de abril de 2010

¿Qué pasaría si...? Un experimento en ciudadanía

Este fin de semana estaba disfrutando del tiempo casi veraniego sentada en la hierba, junto a un pequeño lago que hay cerca de mi casa, mientras mi hijo buscaba tortugas, ranas y pececillos con su red.

Era un momento de estos que se disfrutan muchísimo aunque no se esté haciendo nada especial, simplemente el hecho de estar tomando el sol y ver a los patos nadar en el lago era suficiente para sentise contento y relajado.

Como suele ser inevitable en este país nuestro lleno de incivilizados y desconsiderados, las orillas del laguito mostraban, por supuesto, latas de refresco flotando, bolsas de plástico abandonadas, y todo tipo de restos que los humanos solemos dejar tras de nosotros (aunque seamos muchos los que nos esforcemos por no cumplir esa odiosa norma).

Recordé el enorme parque y el río navegable que había al final de mi calle, cuando vivía en Toronto, por lo general tan limpio, pero donde, de vez en cuando, se acumulaban todo tipo de basuras como papeles, botellas, etc. (ya veis que ni siquiera Canadá, con su imperante civismo, se libra de tener ciudadanos desconsiderados...).

¿La gran diferencia entre este parque de Madrid y aquel de Toronto (dejando aparte el tamaño, claro)?

En el parque canadiense, de forma periódica, aparecían avisos grapados a los árboles del camino más transitado que la gente colgaba de forma privada, invitando a tal día y a tal hora a voluntarios a limpiar el parque, entre todos, ya que el servicio municipal de limpieza no lo hacía con la eficacia o asiduidad que habría sido deseable.

Os preguntareis si aquello funcionaba, si acudían los voluntarios, y os diré que sí.

Y yo ahora me pregunto, ¿qué pasaría si yo hiciese lo mismo en el parque de al lado de mi casa, en Madrid? ¿Pensaría la gente que estoy loca, que para qué quiero dedicarme a limpiar la basura de los demás, que qué más da, que qué importancia tiene, que ni de casualidad van a gastar ni una hora de su precioso fin de semana en hacer algo voluntario y gratificante por los demás, por el barrio, por uno mismo?

Creo que voy a hacer el llamamiento, y en otra entrada os diré qué ha pasado...

25 de abril de 2010

Este servicio debe de ser nuevo

Esta mañana, al intentar acceder a Paperblog, ha aparecido el siguiente mensaje:

Nada más leer eso de que el servicio estaba "indisponible" me ha dado un tic en el ojo, porque me chirriaba completamente la palabreja. Pero como a veces te llevas sorpresas y resulta que palabras que creías incorrectas en realidad no lo son, por si acaso he consultado en varios diccionarios.

El resultado de la búsqueda ha sido que, efectivamente, esa palabra no existe: no la recogen ni el diccionario de la RAE, ni el de María Moliner, ni tampoco el traductor online que suelo utilizar. Así que no sé si es que los responsables de Paperblog han querido ser más originales que nadie usando esa palabra, pero desde luego se han lucido. Con lo fácil que es poner lo que te sueles encontrar siempre en todas partes, aquello de "el servicio no está disponible"...

22 de abril de 2010

Una historia hermosísima en el Día de la Tierra

Hoy leyendo las noticias me he topado con una de esas historias increíbles en las que la realidad supera con creces la ficción y que uno no se explica que no haya oído antes hablar de ella...

No he podido resistirme a compartirla con vosotros, aunque supongo que muchos de vosotros ya la habreis leído hoy mismo, como yo, o quizá sí la conocíais de antes.

La historia recuerda un poco a "El libro de la selva", el libro en el que un niño es abandonado a su suerte y es aceptado en una manada de lobos como uno más.

La diferencia es que esta historia no sucede en la India, ni en otro continente, ni siquiera en otro país. Esta historia sucedió en Sierra Morena.

Yo no voy a ser capaz de transmitirla de forma tan completa como el propio autor del artículo, en el cual, además podréis disfrutar de hermosas fotografías de este peculiar señor y su "familia" de lobos.

Como él mismo dice: "los animales son mejores que las personas".

Os animo a que lo leais, a mí se me saltaban las lágrimas viéndolo jugar con la manada de lobos y acariciarlos con cariño infinito y desinteresado.

¡Feliz Día de la Tierra a tod@s!

21 de abril de 2010

Cuadernos germánicos (X): Wiesbaden

Después de nuestra visita a Rothenburg ob der Tauber por la mañana, nos dirigimos a Wiesbaden. El recorrido hasta allí es de 215 kilómetros, así que llegamos a media tarde. La ciudad no es excesivamente grande, al menos lo que está en el centro, por lo que se puede recorrer andando perfectamente.
Iglesia ortodoxa rusa
Como el único sitio de interés que queremos visitar está en las afueras, concretamente en el monte Neroberg, empezamos por él para luego dirigirnos hacia el centro y ver todo lo demás. Este lugar es una iglesia ortodoxa rusa, a la cual se puede llegar en coche o en un teleférico que te deja en las cercanías.

La iglesia fue erigida entre 1847 y 1855 para albergar los restos mortales de Isabel Mijailovna, esposa del duque Adolfo de Nassau, y para su construcción se tomó como modelo la iglesia de la Ascensión de Moscú (doy fe de que es prácticamente igual a ella). Se suponía, o al menos eso hemos leído en nuestra guía, que un guardián con barba, enorme (tipo monje ortodoxo), estaría en la puerta y se arrancaría a cantar para recibir a los visitantes, pero nos quedamos con las ganas porque allí no hay nadie más que el párroco, y el pobre no tiene pinta de ponerse a cantar...

En el monte Neroberg, además de la iglesia, hay también un monumento a los caídos en las dos guerras mundiales, un complejo de ocio con piscina, una cafetería y uno de los viñedos más antiguos de la zona, que está abierto a los visitantes. La zona verde que da a la piscina y se prolonga hasta la ciudad es un lugar muy frecuentado por los lugareños para tomar el sol (cuando hace sol, claro).
Marktkirche
Una vez que vemos esto, nos dirigimos hacia el centro para, como de costumbre, soltar el coche y recorrernos todo andando. Al final aparcamos en el centro centro, en la Marktplatz, y al salir de allí lo primero que vemos es la espectacular Marktkirche (iglesia del Mercado), que está dedicada al culto protestante y fue construida entre 1852 y 1862, con ladrillos rojos muy llamativos que proceden del Ducado de Nassau. Tiene tres torres neogóticas, una de las cuales es el edificio más alto de la ciudad, con casi 100 metros. Fue la primera construcción realizada exclusivamente con ladrillos procedentes del Ducado de Nassau, que tienen un llamativo color rojo. Frente a ella se encuentra un monumento dedicado a Guillermo de Oranien, y en su interior se suelen llevar a cabo conciertos de órgano y de campanas.
Altes Rathaus
Alrededor de la Marktplatz se encuentran el resto de sitios que se pueden visitar en Wiesbaden. Junto a la Marktkirche están la Marktbrunnen (fuente del mercado), el Altes Rathaus (ayuntamiento antiguo) y el Neues Rathaus (ayuntamiento nuevo), que se construyó entre 1884 y 1887, y cuya fachada renacentista fue destruida, como muchas otras cosas, por los bombardeos de 1945. En el empedrado del suelo junto al edificio se pueden ver el águila del Reich y el león de Nassau. Dentro del ayuntamiento se exponen diversas obras de arte, dedicadas principalmente a Wiesbaden y a sus ciudades hermanadas.
Parlamento
Enfrente del ayuntamiento antiguo, en la misma plaza, tenemos el Stadtschloss (castillo de la ciudad), que fue mandado construir por el duque Guillermo von Nassau hacia 1840. Es un edificio sencillo, de estilo clasicista, y durante el tiempo de los prusianos era el sitio favorito del rey prusiano y del emperador alemán. Desde 1946, este edificio es la sede del Hessischer Landtag (parlamento del estado federado de Hesse). El primer sábado de cada mes se puede acceder a él mediante visita guiada.

Uno de los últimos sitios por los que pasamos es la Kaiser-Friedrich-Therme (terma del emperador Federico), que para muchos es la mejor atracción de Wiesbaden. El edificio existe desde 1913, aunque estuvo sometido a varias obras de restauración y no volvió a abrirse al público hasta 1999. En él se ofrecen diversos tratamientos y hay que reservar porque si no es casi imposible poder entrar; como curiosidad, el martes es el día reservado sólo a las mujeres.
Jardines del casino

Alejándonos del centro, llegamos hasta el Kurhaus Wiesbaden, un edificio clásico restaurado, que data de 1907 y que se ha convertido en el teatro principal de la ciudad, así como en centro de convenciones y casino. Si se quiere visitar, es obligatorio llevar americana y corbata. Ni que decir tiene que nosotros ni nos molestamos en entrar. Eso sí, como el edificio está lleno de andamios (esos que nos persiguieron durante todo el viaje), al menos podemos hacer unas fotos en los jardines, que me sorprenden por lo bien cuidados que están.

Después de haber paseado por todo el centro de la ciudad y haber visto el casino y tiendas de Cartier, Rolex, etc., todas con cosas carísimas, me choca un montón encontrarme con un Games Workshop; no me pega nada una tienda tan friki en esta ciudad tan pija; claro que a lo mejor es por eso por lo que la tienen un poco escondida...

Por lo que podemos ver, esta ciudad está pensada para gente con dinero, más que para turistas. Y por supuesto, como casi todas las ciudades alemanas, para los aficionados al vino y a las Weinfesten (fiestas del vino, a las que los alemanes son realmente aficionados). Si sois unos viciosos de las compras, Wiesbaden será el paraíso para vosotros. Eso sí, ya podéis ir preparando las tarjetas de crédito... Nosotros nos preparamos para visitar Frankfurt al día siguiente.

19 de abril de 2010

¡¡¡Socorro!!!

Supongo que, si hay algún informático que lea esto, le parecerá algo de lo más normal; sin embargo, la primera vez que vi aparecer en mi pantalla este mensaje, me quedé un poco anonadada porque no tenía ni idea de lo que había que hacer a continuación... No entiendo la pregunta, oiga:

La impresora no ha respondido todavía, pero puede que el programa de Microsoft Office pueda continuar sin información de la impresora. ¿Desea continuar o esperar a la impresora?

Sí / No

Sí / No, ¿qué? No sé cuál elegir, vaya forma de hacer una pregunta...

El mensaje en cuestión aparece, en algunas ocasiones, cuando intento abrir Microsoft Word en un ordenador portátil que me prestan de vez en cuando para trabajar. Ahora que ya estoy acostumbrada al mensajillo de marras, cada vez que abro Word no le hago ni caso y, según me dé, pulso en cualquiera de los dos botones porque sé que el resultado va a ser siempre exactamente el mismo: Word se abrirá de todas formas y podré trabajar con él con normalidad. Pero vaya tela, no me digáis que no es para al menos quedarse ojiplático pensando: "Y ahora ¿qué hagoooooooooooooooooo?".

14 de abril de 2010

Una tumba en Dinamarca

Desde hace doscientos dos años, en un lugar perdido de la costa danesa frente a la isla de Fionia, donde siempre llueve y hace frío, hay una tumba solitaria. Tiene una cruz y dos sables cruzados sobre una lápida, y está pegada al muro del cementerio de San Canuto, en Fredericia.

De vez en cuando aparece encima un ramo de flores; y a veces ese ramo lleva una cinta roja y amarilla. Esto puede llamar, tal vez, la atención de quien pase por allí sin conocer la historia del hombre que yace en esa tumba.

Por eso quiero contársela hoy a ustedes.

Se llamaba Antonio Costa, y en 1808 era capitán del 5.º escuadrón del regimiento del Algarbe: uno de los 15.000 soldados de la división del marqués de la Romana enviados a Dinamarca cuando España todavía era aliada de Napoleón. Después del combate de Stralsund, la división había pasado el invierno dispersa por la costa de Jutlandia y las islas del Báltico. Al llegar noticias de la sublevación del 2 de Mayo y el comienzo de la insurrección contra los franceses, jefes y tropa emprendieron una de las más espectaculares evasiones de la Historia.

Tras comunicar en secreto con buques ingleses para que los trajesen a España, los regimientos se pusieron en marcha eludiendo la vigilancia de franceses y daneses. Por caminos secundarios, marchando de noche y de isla en isla, acudieron a los puntos de concentración establecidos para el embarque final.

Unos lo consiguieron, y otros no.

Algunos fueron apresados por el camino. Otros, como los jinetes del regimiento de Almansa, recibieron en Nyborg la orden de sacrificar sus caballos, que no podían llevar consigo; pero se negaron a ello, les quitaron las sillas y los dejaron sueltos: medio millar de animales galopando libres por las playas.

En Taasing, viéndose perseguidos por los franceses y cortado el paso por un brazo de mar que los separaba de la isla donde debían embarcar, algunos del regimiento de caballería de Villaviciosa cruzaron a nado, agarrados a las sillas y crines de sus caballos.

De ese modo, cada uno como pudo, aquellos soldados perdidos en tierra enemiga fueron llegando a Langeland, y 9.190 hombres -sólo unos pocos menos que los Diez Mil de Jenofonte- alcanzaron los buques ingleses que los condujeron a España; donde, tras un azaroso viaje, se unieron a la lucha contra los gabachos.

Como dije antes, no todos pudieron salvarse: 5.175 de ellos quedaron atrás, en manos de los franceses. Algunos terminarían alistados forzosos en el ejército imperial, en la terrible campaña de Rusia -a ellos dediqué hace diecisiete años la novelita La sombra del águila-.

Otros se pudrieron en campos de prisioneros, o quedaron para siempre bajo tres palmos de tierra danesa.

El capitán Antonio Costa fue uno de ésos.

A causa de la indecisión de sus jefes, el regimiento de caballería del Algarbe perdió un tiempo precioso en emprender su fuga hacia la isla de Fionia, donde debían embarcar. Por fin, cuando Costa, un humilde y duro capitán, tomó el mando por propia iniciativa, desobedeció a sus superiores y se llevó a los soldados con él, ya era demasiado tarde.

En la misma playa, casi a punto de conseguirlo, el regimiento fugitivo vio bloqueado el paso por el ejército francés, con los daneses cortando la retirada. Furioso, el mariscal Bernadotte exigió la rendición incondicional, manifestando su intención de fusilar a los oficiales y diezmar a la tropa.
Entonces el capitán Costa avanzó a caballo hasta los franceses y se declaró único responsable de todo, pidiendo respeto para sus soldados.

Luego, no queriendo entregar la espada ni dar lugar a sospechas de que había engañado o vendido al regimiento llevándolo a una trampa, se volvió hacia sus hombres, gritó «¡Recuerdos a España de Antonio Costa!» y se pegó un tiro en la cabeza.

Así que ya lo saben.

Ésta es la historia de esa lápida pegada al muro del cementerio de San Canuto, en Fredericia, Dinamarca. La tumba solitaria de uno que quiso volver y pelear por su patria y su gente.

Reconozco que eso no suena políticamente correcto, claro: pelear. Esa palabra chirría. Tan fascista. Nuestra ministra de Defensa habría criticado, supongo, la intransigencia dialogante del tal Costa -maneras autoritarias y poco buen rollito, misión que no era estrictamente de paz, gatillo fácil-; y monseñor Rouco, nuestro simpático pastor de ovejas, su falta de respeto a la vida humana, empezando por la propia, incluido un serio debate sobre si, como suicida, tenía derecho a yacer en tierra consagrada, o no lo tenía -igual hasta era partidario del aborto, el malandrín-.

Lo mío es más simple: el capitán Costa me cae de puta madre.


Su tumba solitaria me suscita un puntito de ternura melancólica. Ese cementerio lejano, frente a un mar gris y extranjero.

Por eso hoy les cuento su vieja, olvidada historia. Por si alguna vez se dejan caer por allí, o están de paso por las islas del Norte y les apetece echar un vistazo. A lo mejor hasta tienen unas flores a mano.

Arturo Pérez-Reverte
Patente de Corso

"JFK, caso abierto"

Se ha escrito y especulado tanto alrededor del asesinato del Presidente John F. Kennedy, que parece imposible que haya algún nuevo o revelador dato que aportar.

Cuando se intenta profundizar sobre este tema, uno se encuentra con un gran obstáculo, que es la enorme cantidad de información falsa, gracias a millones de conspiranóicos, que hay disponible, ahora más que nunca gracias a internet. Pero si uno intenta ir más allá del mero foro de intercambio de opiniones y de vídeos falsos o retocados en youtube, puede encontrar auténticas revelaciones en forma de libros, documentos y estudios fotográficos serios.

Es el caso de este libro que os recomiendo, JFK, caso abierto, escrito por el prestigioso periodista francés William Reymond a partir del testimonio del magnate tejano Billie Sol Estes.

Escrito en el año 2004, aporta los datos más recientes (hasta el momento) de que se dispone sobre el caso del asesinato de JFK, y la razón por la cual todos estos documentos incriminatorios no habían salido a la luz anteriormente es muy sencilla: el Sr. Estes simplemente no había querido hablar antes, por razones que se dejan bien patentes a lo largo de sus páginas y que, resumiendo, se reducen a su lealtad hacia Lyndon B. Johnson, quien sucedió de forma inmediata a Kennedy a las pocas horas de su muerte (al más puro estilo golpe de Estado; si uno se para a pensarlo con detenimiento... ¿Dónde se ha visto que a un presidente asesinado lo suceda el primero de turno, sin sufragio ni nada que se le parezca...?).

La relación entre Billie Sol Estes y Lyndon B. Johnson no debe ser interpretada como tal, pues básicmante se reducía al hecho de que Estes financió durante años de forma interesada a Johnson y este, a su vez, hacía la vista gorda ante el desvío de subvenciones muy cuantiosas que iban a parar a las arcas del Señor Estes.

Los documentos que posee Billie Sol Estes dejan claro y sin lugar a dudas que hubo al menos tres tiradores, incluso da la identidad con pruebas irrefutables (como huellas dactilares perfectamente claras) del segundo tirador, que no es otro que un asesino a sueldo que Lyndon B. Johnson habíia contratado ya varias veces con anterioridad al asesinato de Kennedy para quitarse de en medio a personajes “molestos”. No doy su nombre para que lo descubráis entre las páginas de este libro.

Como dice el propio Sol Estes: no hay que darle muchas vueltas a la razón por la que se asesinó a Kennedy, ni tampoco hay que buscar a los conspiradores en Cuba, ni en Rusia ni en ninguna parte que no sea Tejas: Lyndon B. Johnson quería la Casa Blanca desde que tenía uso de razón. Con la llegada de Kennedy a la escena política por sorpresa, vio que esa meta se le escapaba de las manos ante sus propios ojos. Y decidió actuar.

Y si eso parece algo demasiado fuerte para afirmar así, os animo a que leais este libro, que os va a llevar una semana escasa, y, como me pasó a mí, se os ponga la carne de gallina con la última frase que se recoge en él, transcrita directamente de una cinta magnetofónica grabada a escondidas durante una reunión de “amigos” de Lyndon B. Johnson, que el Sr. Billie Sol Estes ha estado guardando celosamente como su seguro de vida hasta que decidió contarle todo a este periodista francés.

La noche en que terminé este libro y leí esa última frase entrecomillada, no pude dormir, pensando en lo que contenía…

Os dejo, además, un enlace que no tiene desperdicio, que lo lleva Mr. Fletcher Prouty, que no es otro que la persona real que se escondía tras el misterioso Señor X de la película "JFK" de Oliver Stone, interpretado magistralmente por Donald Sutherland.

13 de abril de 2010

La ciencia no lo explica todo

Esta entrada quizá os parezca de una temática un tanto inusual, pero esto es algo que quiero compartir con todos vosotros, no desde el punto de vista teológico o milagrero, sino desde el punto de vista científico, para que no penseis que soy una fanática que no atiende a razones.

Nada más lejos de la realidad.

Aunque la fe no necesita de pruebas para sustentarse (precisamente en eso consiste la fe, en creer sin ver, lo cual es muy muy difícil, creo yo...), a mí particularmente me satisface encontrar casos de sucesos milagrosos o extraordinarios, a los que la ciencia no puede arrebatarles su carácter divino o sobrenatural, pues no encuentran forma humana de esclarecer esos hechos en concreto.

Quizá muchos conozcais un poco de pasada, o de oídas, el caso de la imagen de la Virgen de Guadalupe, en México.

Para no extenderme mucho, os dejo con los datos científicos (que no las explicaciones) sobre esta imagen, de casi 500 años.

Creo que a nadie le dejarán indiferente.

Los ojos de Guadalupe constituyen uno de los grandes enigmas para la ciencia en estos momentos, como han constatado los estudios del ingeniero José Aste Tönsmann del Centro de Estudios Guadalupanos de México.

Este graduado en ingeniería en sistemas ambientales por la Universidad de Cornell ha estudiado durante más de veinte años la imagen impresa de la Virgen en ese tosco tejido hecho con fibras de maguey de Juan Diego, el indígena que recibió las apariciones que cambiarían decisivamente la historia de México.

Trece personajes en los ojos de la Virgen

Si bien sus dimensiones son microscópicas, el iris y las pupilas de los ojos de la imagen tienen impresa al menos la imagen sumamente detallada de trece personajes. Las mismas personas están presentes tanto en el ojo izquierdo como en el derecho, con diferentes proporciones, al igual que sucede en los ojos de un ser humano que refleja los objetos que tiene enfrente.

El reflejo transmitido por los ojos de la Virgen de Guadalupe es la escena en la que Juan Diego mostraba al obispo fray Juan de Zumárraga y a los presentes en la estancia el manto con la misteriosa imagen. Era el 9 de diciembre de 1931.

Un estudio digital

La técnica que ha utilizado para su estudio el ingeniero Aste Tönsmann es la del proceso digital de imágenes usado por los satélites y por las sondas espaciales para transmitir informaciones visivas. El científico, de hecho, ha trabajado durante años en IBM en procesamiento digital de imágenes.

No es pintura

Según las conclusiones del estudio, reveladas por Aste Tönsmann a Zenit, durante una visita que realizó a Roma a inicios de enero, nos encontramos ante una imagen «que no ha sido pintada con mano de hombre».

Se conserva inexplicablemente

Ya en el siglo XVIII varios científicos realizaron pruebas científicas que mostraban cómo era imposible pintar una imagen así en un tejido de esa textura. De hecho, con el pasar del tiempo, las fibras del «ayate» que utilizaban los indios se degradan. Normalmente no deberían durar más de veinte años. Sin embargo, la imagen está impresa desde hace 470 años.

Sin colorantes naturales

Richard Kuhn premio Nobel de Química, recordó Aste Tönsmann, hizo análisis químicos en los que se pudo constatar que la imagen no tiene colorantes naturales, ni animales ni mucho menos minerales. Dado que en aquella época no existían los colorantes sintéticos, la imagen, desde este punto de vista, es inexplicable.

Numerosas preguntas sin respuesta

En 1979 los estadounidenses Philip Callahan y Jody B. Smith estudiaron la imagen con rayos infrarrojos y descubrieron con sorpresa que no había huella de pintura y que el tejido no había sido tratado con ningún tipo de técnica.

Aste Tönsmann, se pregunta, «¿Cómo es posible explicar esta imagen y su consistencia en el tiempo sin colores y con un tejido que no ha sido tratado? Es más, ¿cómo es posible que, a pesar de que no haya pintura, los colores mantengan su luminosidad y brillantez?».
Iridescencia

El ingeniero peruano explica que «Cahallan y Smith han mostrado cómo la imagen cambia ligeramente de color según el ángulo de visión, un fenómeno que se conoce con el término de iridescencia, una técnica que no se puede reproducir con manos humanas».
Como hubiera sucedido en cualquier persona

El investigador comenzó a desarrollar su estudio en 1979. Agrandó los iris de los ojos de la Virgen hasta alcanzar una escala 2.500 veces superior al tamaño real y, a través de procedimientos matemáticos y ópticos, logró identificar todos los personajes impresos en los ojos de la Virgen.

En los ojos de la Virgen –revela– se encuentran reflejados los testigos del milagro guadalupano, el momento la que Juan Diego mostraba el ayate al obispo. Los ojos de la Virgen tienen así el reflejo que hubiera quedado impreso en los ojos de cualquier persona en esa posición.

Los diversos personajes

Se puede individuar un indio sentado, que mira hacia lo alto; el perfil de un hombre anciano, con la barba blanca y la cabeza con calvicie avanzada, como el retrato de Juan de Zumárraga realizado por Miguel Cabrera para representar el milagro; un hombre más joven, con toda probabilidad el intérprete Juan González; un indio de rasgos marcados, con barba y bigote, que abre su propio manto ante el obispo, sin duda Juan Diego; una mujer de rostro oscuro, una sierva negra que estaba al servicio del obispo; un hombre de rasgos españoles que mira pensativo acariciándose la barba con la mano.

La ciencia puede mostrar la realidad indiscutible presente en la imagen, no su origen

En definitiva, en los ojos de la imagen de la Virgen de Guadalupe está impresa una especie de instantánea de lo que sucedió en el momento en que tuvo lugar el milagro.

En el centro de las pupilas, además, a escala mucho más reducida, se puede ver otra «escena», totalmente independiente a la primera. Se trata de una familia indígena compuesta por una mujer, un hombre, y algunos niños. En el ojo derecho, aparecen otras personas de pie detrás de la mujer.

Hasta aquí llega la ciencia, fue la conclusión de Aste Tönsmann. El cómo se ha realizado algo así no es posible descifrarlo con métodos científicos.

10 de abril de 2010

Bolsas originales

A través de Bored Panda hemos encontrado una entrada que nos ofrece una muestra de bolsas de la compra de lo más original.

Hasta completar una lista de un total de treinta, hay bolsas de todo tipo, desde las que anuncian cosas tan típicas como televisores, diversos aparatos electrodomésticos, automóviles, lencería o cerveza, hasta otras menos vistas como la de Greenpeace, la de la Cruz Roja que acompaña a esta entrada, o la de una asociación de ayuda a niños autistas; hay incluso bolsas "mágicas" (concretamente la que ocupa el puesto número 22 de la lista) y hasta Yulia Timoshenko, candidata a la presidencia de Ucrania, tiene la suya (la número 17, aunque hay quien comenta que es un montaje).

Nunca deja de sorprenderme la imaginación que tienen algunos publicistas, porque aunque no es la primera vez que veo algo así, nunca me había encontrado tantas muestras juntas en el mismo sitio. En cualquier caso la idea me parece genial; ya podían tomar nota en algunos comercios, porque la verdad es que hay por ahí bolsas de la compra que resultan de lo más soso, incluso cuando de vez en cuando les hacen algún que otro cambio por ejemplo en Navidades...

6 de abril de 2010

Estos templarios...

Aprovechando los días de vacaciones de Semana Santa, el fin de semana lo pasamos en Toledo. Como el sábado nos fijamos en que había una exposición sobre templarios, pero ya era un poco tarde y no nos apetecía verla en plan acelerado, hicimos un hueco el domingo por la mañana para acercarnos a verla.

La exposición, que lleva por título "Templarios y otras órdenes militares" y estará alojada en la Posada de la Hermandad desde el 18 de marzo hasta el 13 de octubre de 2010, nos resultó bastante interesante. Sin embargo, como no puedo evitar ir fijándome en todos los textos, letreros, titulares, etc., me encontré unas cuantas erratas; algunas eran tan "pasables" como el hecho de que se les hubiera colado un espacio en blanco de más (o de menos) entre dos palabras, pero hubo una que me sorprendió y que hizo que se me pusieran los pelos como escarpias. Os transcribo a continuación la "perla" (es que la foto se ha cortado un poco y no se lee el texto completo):

FORMACIÓN DE BATALLA
"Llegado el combate y a la orden del mariscal la infantería habría sus filas dejando paso a la caballería, la principal y más temida arma de los templarios."

¡Por Dios! ¿Quién ha escrito eso? Que lo de los espacios en blanco hasta puede tener un pase, pero esto de que las filas se "habran" para colocarse en posición de combate me chirrió tanto que casi tuve un tic nervioso en el ojo durante todo el resto del tiempo que seguí viendo la exposición...

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